Y el mundo nunca lo sabrá…

El mundo a veces, nunca sabe algunas cosas, y algunas son verdaderamente importantes. No sabe lo que hacemos por unas personas o por otras, no sabe lo que sufrimos, lo que nos pasa, lo que nos atemoriza, lo que nos amilana, horripila, nos hace sensibles, nos hace sonreír o nos hace volar….y además, ese camarilla de sentimientos, de sensaciones, muchas veces nadie las sabe ni nadie las sabrá….yo he hecho muchas cosas por personas que nunca sabrán y que luego han creído que han venido por que sí, por azar, por ventura y no ha sido así. Pero son esa clase de cosas que nunca dices, que te callas por que para qué las vas a decir.

Recuerdo muchas cosas que nunca he contado : una regalar unas rosas a una chica cuando tenía 16 años y nunca decirle quien fue. En el colegio ayudar a un compañero a aprobar una asignatura haciéndole el examen yo, nunca supo que sacó un 9 por que yo le hice el examen y le dí el cambiazo al entregarlos. Recuerdo un regalo que nunca la persona a la que se lo hice supo quien se lo regaló, y recuerdo miles de situaciones parecidas, de otras ni me acuerdo. Y son detalles que nunca cuentas, quedan omitidos y llevas en tu interior toda tu vida sin contarlos a nadie; desde luego que no son malos, son cosas que haces sin más, filantrópicamente. Yo he hecho muchas veces cosas así, quizás por que soy demasiado subnormal, o quizás no; la verdad que no sé si alguien ha tenido un detalle así conmigo, creo que en la vida, tampoco me gustaría saberlo, creo que es mejor que quede en el anonimato. Para mal seguro que sí y de eso no me cabe la menor duda, aunque quiero pensar que alguna vez para bien también, no todo en la vida ha de ser malo.

La vida está llena de concomitancias que nos rodean en nuestros quehaceres cotidianos; cada persona sabe muy bien qué ha hecho bien y qué ha hecho mal y yo no soy quien para juzgar a nadie. Pero aquellas cosas, que hacemos, y de las que nadie tiene constancia que han sucedido, sean buenas o malas, haya cada cual, el mundo, nunca las sabrá….quedarán para nosotros y las recordaremos siempre que queramos.